“En mi aula apenas usamos el libro de texto, utilizamos MATIC, una herramienta digital de aulaPlaneta ”

12 de Julio 2013

“En mi aula apenas usamos el libro de texto, utilizamos MATIC, una herramienta digital de aulaPlaneta ”

Entrevistas

Vicente Alapont Cirujeda es licenciado en Matemáticas y lleva veinte años dedicado a la docencia. Actualmente imparte clases de matemáticas en la escuela María Inmaculada de Alfafar, Valencia. Hace dos años decidió dejar de usar libros de texto y usar matic porque le permitía practicar, hacer ejercicios y aplicarlo en problemas, dando respuestas tanto a los niños que necesitaban más refuerzo como a los que tenían más facilidad.

En esta entrevista nos devela su experiencia al utilizar matic en clase con sus alumnos.

¿Cuántos años de experiencia tienes como profesor? Hace dos años que introdujiste matic. ¿Por qué?

Me llamo Vicente, estudié la carrera de Matemáticas y desde hace veinte años me dedico a dar clase. Soy profesor en la escuela María Inmaculada de Alfafar, Valencia, en los cursos de segundo, tercero y cuarto de ESO.

En mi aula apenas usamos el libro de texto, utilizamos matic, una herramienta digital de aulaPlaneta para el aprendizaje adaptativo de matemáticas. Específicamente en mi asignatura lo más importante es resolver problemas, y puesto que matic ofrece una amplia variedad de ejercicios con diferentes grados de dificultad y que se adapta a las habilidades de los alumnos, me resulta muy útil y cómodo, ya que se adapta a los diferentes ritmos de aprendizaje de los alumnos.

¿Cómo impartes las clases?

Hay veces que las clases las empiezan los alumnos solos, con apenas un par de indicaciones; otras, sobre todo cuando el tema es nuevo, doy una breve explicación y dejo que ellos vayan probando. Gracias al ensayo y error, que se pueden corregir ellos mismos a partir de las soluciones, van progresando y ganan autonomía. En general, les explico o recupero conocimientos previos, y hago que ellos avancen.

¿Elaboras tu propio material teórico?

En tercero y cuarto de la ESO apenas existe parte teórica más allá de unas cuantas fórmulas, que suelo escribir en la pizarra. A veces lo que hago es darle las fórmulas, unas pinceladas teóricas, incluso uso matic en el aula como si fuera un alumno; es decir, hago unas cuantas tareas para que los estudiantes vean los pasos a seguir y cuando creo que tienen la confianza como para hacerlo solos, les mando la tarea para que cada uno la haga a su ritmo.

¿Cuánto tiempo estuviste dando clases con libros de texto y en qué momento cambiaste a matic? ¿Por qué cambiaste?

Cambié hace dos años. Estuve dieciocho años con libros de texto y llevo dos utilizando matic porque tenía la sensación de no tenía mucho sentido seguir utilizando el libro de texto. Al final, lo que más me interesa es que los alumnos sepan hacer cosas, es decir la parte práctica de resolver problemas y aplicar los conocimientos. Por eso me pasé a matic, porque ofrece una gran variedad de ejercicios. Por otro lado, en la ESO no puedes exigir demasiados conocimientos teóricos de matemáticas. Lo primordial es que conozcan bien los algoritmos y que los sepan aplicar en problemas, y gracias a matic tengo esas dos cosas: por un lado, ejercicios de rutina que les permitan adquirir los conocimientos y fluidez, y luego problemas para que puedan poner en práctica esos conocimientos.

¿Y qué opinan los alumnos de matic?

A ellos les gusta. Lo ven como algo nuevo y, sobre todo, están deseando trabajar con tablets. Cambiar los libros de texto por los tablets es algo positivo para ellos, ya que les encanta salirse de la rutina. Aun así, es necesario recordarles que no es un juego. Y además de matic, utilizan un cuaderno. El cuaderno es imprescindible: hay alumnos que lo copian todo, pero lo importante es que aprendan a aplicarlo y comprender cómo resolver problemas a partir de su práctica. Hay días, cuando los ejercicios son mecánicos, dejo que se pongan música. Lo mejor es que, además de estar encantados, trabajan y se motivan.

¿Cómo evalúas los conocimientos?

Al final de la evaluación les hago un examen, que a menudo son capturas de pantalla de matic a partir de los ejercicios que me resultan más interesantes, o incluso a veces directamente con matic. La nota va en función no solo de ese examen sino también de cómo trabajan y de qué actitud tienen a lo largo de la evaluación. Y tengo en cuenta qué trabajo han realizado con matic, que es una parte de la nota: veo que trabajan y avanzan, pero igualmente les realizo un examen.

¿Cómo valoras que matic ofrezca ejercicios individualizados para cada estudiante? ¿Das mucha autonomía a los alumnos?

Lo valoro positivamente. Y ellos también. Muchas veces dejo también que se ayuden entre ellos, que los que acaben primero el ejercicio y tengan más integrado cómo hacerlos, echen una mano a sus compañeros. Creo que el trabajo cooperativo favorece el aprendizaje. Me encanta que trabajen y se ayuden entre ellos, cuanto más mejor, porque se hacen más caso entre ellos.

Por otro lado, sí que doy autonomía a mis alumnos. Ganan mucha autonomía: ellos mismos ven cómo hay que resolverlo y aprenden de ello. Y vuelven a intentarlo.  Soy consciente de que uno trabaja a su ritmo.

¿Qué pasa cuando algún estudiante tiene dificultades? ¿Cómo lo gestionas?

Pasa a veces, que los niños que avanzan sin dificultades, pero si atascan en algún ejercicio, que a veces pasa, les pido que paren un par de minutos. Les cuesta, no les gusta nada parar porque no quieren disminuir su ritmo y les gusta ir avanzando.

Hay que hacer pizarra, pero es bueno el trabajo individual y voy paseando y atendiendo a unos u otros, o cuando veo que es necesario parar y hacer que trabajen un aspecto, pues lo hago. Es una clase muy flexible.

Si comparamos la manera en que trabajabas antes y la manera en que trabajas ahora, ¿consideras que el aprendizaje ha mejorado?

Todavía es pronto para dar una respuesta precisa, pero si tuviera que apostar, diría que el aprendizaje ha mejorado. Los alumnos están haciendo cosas que antes no hacían y, además, por sí mismos. En temas como estadística o probabilidad, funcionan prácticamente solos. En cuanto a conocimiento teórico me atrevería a decir que el nivel es similar, pero en aspectos como las estrategias, las habilidades, las competencias o la autonomía el aprendizaje ha mejorado considerablemente, sí o sí.

¿Tú crees que matic se adapta a la línea y al ritmo de aprendizaje de cada alumno?

Sí, cada uno va a su ritmo, y es algo que valoro muy positivamente, además es muy cómodo. Hay gente que se me quedaba descolgada, y ahora les mando otras cosas. Por ejemplo, antiguamente los que acababan rápido tenían que esperar a que terminara el resto de la clase para continuar. Ahora no ocurre. Con matic puedo plantearles nuevos desafíos a los que han terminado esos ejercicios. Es muy cómodo.  

Aunque la clase sea heterogénea y tenga diferentes niveles, ¿crees que con matic se puede atender tanto a los alumnos que están al nivel más alto como a los que están a un nivel más bajo?

Sí, creo que se puede atender a todos los alumnos. Antes era más difícil ocuparse de cómo avanzaba cada estudiante. Gracias al seguimiento personalizado que permite matic resulta más cómodo estar atento al progreso de cada uno, a conocer sus habilidades o a estar al tanto de cuáles son sus dificultades.

Por ejemplo, un niño que tenía muchas dificultades, con matic aprobó; mejoró muchísimo. Y, por otro, los que avanzan más a veces si han acabado las tareas, les permito trabajar otros conceptos y avanzar. Dentro del avance de toda la clase, me permite adaptar más lo que hace cada uno.

Y además, todos han aprendido que no pasa nada por hacer varias veces una tarea con distintos ejercicios, sino que van aceptando que se debe practicar hasta conseguir mejorar y consolidar. No solo es conseguir una nota, sino que debe trabajarse y practicar más. Premio el mayor trabajo hecho.

A nivel de diagnóstico, a nivel de calidad como profesor, ¿cómo te sientes con matic?

Me siento cómodo, aunque tengo que reconocer que al principio me agobié un poco, ante el hecho de no utilizar libro, que era algo físico a lo que recurrir. Con el libro de texto tenías el camino ya trazado, en cambio si ahora quiero elegir otro camino y plantear una programación que me parezca más interesante o adecuada, lo tengo más fácil. Y precisamente porque no hay nada predefinido, los alumnos no tienen ningún problema cuando se dan estos cambios. Me es muy cómodo y fácil flexibilizar la programación según veo más adecuado.

¿Percibes que matic te da una visión real de cómo aprende cada alumno?

Totalmente. Veo cómo trabajan y cómo evolucionan. Si están trabajando significa que están aprendiendo, creo que es la única manera de aprender matemáticas. La experiencia me dice que con una clase entera de pizarra los alumnos terminaban desconectando de las explicaciones. Con matic eso no ocurre. Todos los alumnos están aprendiendo y lo ves: no pueden desconectar y ves dónde y cuándo les surgen las dificultades.