El documental Entre maestros reta a los docentes a plantearse otras formas de enseñanza
El documental Entre maestros recoge el sueño de Carlos González, un profesor de Secundaria que quería enseñar a sus alumnos de una manera diferente, para sacar lo que llevaban dentro y prepararles de verdad para la vida. De su labor diaria durante 24 años surgió el libro Veintitrés maestros, de corazón: un salto cuántico en la enseñanza y, ahora, una película que pone en práctica su teoría de “educar empoderando”, es decir, dando seguridad al alumno para que él mismo descubra el mundo.
INSPIRACIÓN PARA OTROS DOCENTES
El afán de Carlos es que su experiencia sirva para ayudar a otros maestros a replantearse los métodos de enseñanza. “Lo que yo he hecho en doce días en el documental es una propuesta para que los maestros la apliquen a lo largo de un curso, con el ritmo y la idiosincrasia que cada uno tenga”, comenta el docente, que ahora imparte formación a profesores para implicarles en su método.
Como él mismo explica, en Entre maestros encarna al profesor que había imaginado y que no había podido desplegar al cien por cien en sus clases. Ante él, once chicos adolescentes, rebeldes y con la etiqueta de fracaso escolar a las espaldas, experimentan doce días bastante heterodoxos en un aula donde se alternan la provocación y el desconcierto. El ejercicio es interesante para estudiantes y profesores, pero también para espectadores ajenos al ámbito educativo.
UNA ORQUESTA QUE DEBE SONAR AFINADA
El título del documental hace referencia, como explica Carlos, a que “en clase todos somos maestros, pero profesor solo hay uno, igual que toda orquesta tiene un único director”. La clave se encuentra en que el profesor-director debe estar al servicio de cada uno de los músico-alumnos, darse cuenta de cómo cada uno de ellos puede dar lo mejor de sí según el instrumento que toque.
CONOCERSE A UNO MISMO PARA APRENDER A VIVIR
Por lo tanto, lo que este profesor desarrollaba en su libro y plasma ahora el documental es “una nueva mirada educativa” y “una nueva relación entre maestros y alumnos”. Esta mirada se centra en educar desde el autoconocimiento y pretende que el alumno descubra cómo es en realidad y sea consciente de lo que quiere, de sus sueños.
Solo así, moviendo la base sobre la que se sustenta el alumno, este podrá quitarse los lastres que le impiden vivir consecuentemente y no conforme a lo que le dice su cultura, su familia o el mundo que le rodea. Descubrirá que “esa parte que le hace sentir inseguro no es él mismo, sino un personaje” y que “si consigue estar por encima de ese personaje, nadie podrá hacerle sentir inseguro”.
ANÍMATE A ENSEÑAR DE OTRA FORMA
En su blog Carlos explica todas estas teorías y prácticas, da consejos e ideas y reflexiona sobre los nuevos retos de la educación. Además, tiene otra página centrada en informar de sus próximas charlas y talleres.
A través de ambas webs y del libro de Carlos (disponible para su descarga gratuita), puedes asomarte a la peculiar visión educativa de este profesor y, quizás, animarte a aplicar sus consejos en el aula. Al respecto, Carlos avisa de que el autoconocimiento debe empezar por ti mismo: “No todos los profesores tienen por qué hacer lo mismo, deben buscar esta nueva mirada educativa y aplicarla a su manera, con mecanismos propios”.
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